Luego de completar un período de mantenimiento, modificación y modernización en dique seco, el portaaviones de propulsión nuclear USS Dwight D. Eisenhower, perteneciente a la Armada de Estados Unidos, ha retornado al mar este 28 de agosto. Los trabajos iniciados en septiembre de 2013 en el astillero naval de Norfolk, Virginia, han requerido 23 meses para llevar adelante el denominado Dry-Docking Planned Incremental Availability (DPIA), algo así como Programada Disponibilidad Incrementada en Dique Seco. Los trabajos realizados en cooperación con la tripulación le permitirán al portaaviones mantener su aprestamiento operacional por los próximos diez años. Entre los sistemas intervenidos del enorme vector aeronaval destacan los ejes de transmisión, timones, unidades de destilación, mejoras en 117 mil pies cuadrados con la rehabilitación de 25 compartimentos para la tripulación, reemplazo de 150 mil pies cuadrados de superficie antideslizante en la cubierta de vuelo, overhaul de las cuatro catapultas de lanzamiento de aeronaves, entre otros.
En agosto del año pasado, el portaaviones fue trasladado del Dique Seco 8 (tras la inundación del gigantesco dique) al muelle 42/43 tras haber completado 12,500 items de trabajo. De acuerdo al comandante del CVN-69, capitán Steve Koehler, se trata del más completo DPIA aplicado a ningún protaaviones de la Armada estadounidense a la fecha. El portaaviones emprende ahora elmandatorio período de pruebas de mar, incluyendo evaluación general de sistemas, operaciones básicas de superficie, operaciones en cubierta de vuelo, control de daños, etc. El próximo despliegue del buque capital, el número 15, está programado para mediados del próximo año.
